
Existen muchas opciones de tratamiento para los problemas de la articulación temporomandibular. La férula de descarga es la opción más escogida y con mejores resultados en cuanto al alivio del dolor al paciente. Como complemento a esta o como tratamiento único, también se suelen utilizar analgésicos, antiinflamatorios o relajantes musculares.
Cuando los otros tratamientos no dan resultados, se pueden sugerir otro tipo de procedimientos quirúrgicos; incluso infiltraciones de corticoesteroides o toxina botulínica en los músculos responsables de la masticación para aliviar el dolor asociado a estos trastornos.